El
Lago del Parque Rivera es un lago artificial. Fue mandado hacer por el
primer propietario del predio, el Sr. Pierre Durandeau. Su finalidad era
para el esparcimiento y diversión del propietario y sus visitas.
Su profundidad máxima – que no es mucha – no supera el 1,50
mts.. No tiene un fondo parejo por la acumulación de sedimentos a lo
largo de los años, por lo tanto, en realidad no se pueden dar medidas
exactas.
Tampoco se pueden dar medidas precisas sobre el perímetro ya que
hace poco tiempo fue dragado y limpiado en su bordes
por la Intendencia Municipal de Montevideo, logrando así su
mejoramiento sanitario.
Este lago es visitado año a año por un sinnúmero de aves
migratorias como por ejemplo garzas blancas y rosadas, garcetas y patos
de varios tipos. Estos últimos no están de paso solamente, algunos
viven todo el año – por supuesto no en gran cantidad durante el
invierno -. Cuando llega la primavera se los puede ver paseando con sus
crías por todo el derredor. Viven y desovan en las pequeñas islas que
están dentro del lago; que según cuenta la leyenda popular, don
Durandeau las había mandado a hacer para los encuentros con su “amada”.
También hay una variedad importante de especies de plantas
acuáticas y juncos. Pero debido a
cambios climáticos que hubieron últimamente, se tuvieron que sacar la
mayoría con máquinas ya que se reprodujeron en demasía y no
permitían la normal circulación del agua y salida hacia la cañada.
(Si querés saber más sobre este tema visitá nuestra Página
Ecológica).
Es un lugar ideal para pasear todo el año. Todo a su alrededor
tiene bancos hechos en piedra, un pequeño muelle, caminitos de material
para pasear tanto caminando como en bicicleta, etc.
Hace muchos años atrás habían botes que circulaban por el
lago, que transformaban al paseo en un momento inolvidable.
Actualmente la IMM se está haciendo cargo de su cuidado y
recuperación, y según se sabe, está en su planes volver a poner en
circulación los botes.
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